Crisis deportiva, escándalos institucionales y liderazgo personalista: el Boca de Riquelme atraviesa su peor momento en décadas.
⚽ Rendimiento deportivo: el declive de un gigante
Desde que Juan Román Riquelme asumió la presidencia el 18 de diciembre de 2023, Boca atraviesa el periodo más pobre de los últimos 30 años:
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11 partidos oficiales sin ganar (última victoria: 20 de abril de 2025).
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Eliminado en la 3.ª fase previa de la Libertadores ante Alianza Lima.
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Fuera en la fase de grupos del Mundial de Clubes tras un empate humillante con Auckland City.
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Cero títulos en 19 meses y 4 entrenadores en ese periodo.
La inestabilidad deportiva y la ausencia de un proyecto sólido han transformado a Boca en un equipo irreconocible.
🏟️ Gestión deportiva errática
El Consejo de Fútbol que Riquelme creó con Cascini, Serna, Bermúdez y Delgado se convirtió en símbolo de improvisación y destrucción en el club "Xeneize".
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12 fichajes por 10 M US$, con poco impacto real.
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Solo 4 titulares habituales.
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Scouting limitado al fútbol local, sin apuestas internacionales.
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Cambios constantes de entrenadores sin continuidad.
💰 Crisis financiera y riesgo institucional
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Balance al 30 de junio de 2024: superávit operativo 2,8 M US$, pero ingresos -18 % por ausencia en Libertadores.
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Pasivo corriente: 46 M US$ (+12 %) por pagos aplazados y anticipos de TV.
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Riesgo de déficit 2025-26 si no clasifica a la Libertadores 2026.
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Proyecto Bombonera 360° paralizado por falta de financiamiento.
🏛️ Escándalos institucionales: nepotismo y abusos
El entorno de Riquelme enfrenta graves polémicas que dañan la imagen del club:
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Cristian “Chanchi” Riquelme, su hermano y hombre de confianza:
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Acusado de usar oficinas del club para encuentros sexuales con una influencer, según chats filtrados.
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Perimetral judicial de seis meses tras denuncia de amenazas y agresión.
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Señalado por manejo irregular de entradas y privilegios internos.
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Estos episodios han llevado a muchos socios y críticos a describir el entorno presidencial como “un grupo mafioso” que prioriza intereses personales sobre la institución.
📉 Conclusión Fútbol Insider
Boca Juniors vive su momento más frágil en dos décadas.
Mientras conserva su masa social y marca global, está atrapado entre la improvisación deportiva, la crisis institucional y el personalismo de su presidente.
“Ser un extraordinario futbolista no garantiza ser un buen gestor. La falta de preparación y el nepotismo han hundido el proyecto de Riquelme en Boca.”
El club necesita profesionalizar su gestión, reconstruir un proyecto deportivo serio y recuperar su credibilidad institucional antes de que la caída sea irreversible.
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